El término «Tag Management System» identifica herramientas y sistemas para gestionar etiquetas, es decir, fragmentos y porciones de código que se inyectan en la sección <head> de una página web para implementar nuevas funcionalidades o supervisar el rendimiento.
Las funciones y actividades de seguimiento incluyen análisis web, actividades de personalización, A/B test, actividades de retargeting y seguimiento de la conversión.
Fueron creados con el objetivo de facilitar las actividades de los webmasters que, gracias a estos sistemas, tienen la capacidad de gestionar sus etiquetas de forma sencilla e intuitiva.
Todo esto es posible gracias al uso de una única etiqueta de contenedor que se inyecta en el sitio y que contiene toda la información de las etiquetas que contiene. Por lo tanto, la actividad del sistema de gestión de etiquetas tiene lugar fuera del sitio, dentro de plataformas que le permiten activar fácilmente las etiquetas individuales dentro del propio contenedor.
Aquí, como hemos dicho, se recogen y estandarizan las diferentes etiquetas relacionadas con las diferentes plataformas (piensas en el píxel de Facebook o Google ADS) que necesitamos activar para no generar conflictos a través de la capa de datos.
Las ventajas de un sistema de gestión de etiquetas con Google Tag Manager son numerosas y, por lo general, pueden atribuirse a la facilidad de uso, incluso para recursos no expertos.
Éstos son los principales:
- aceleración la fase de creación de campañas;
- reducción del tiempo de carga de la página debido a la necesidad de inyectar únicamente la etiqueta contenedora en el sitio;
- control preciso de los costes de adquisición de socios;
- gestión de la privacidad según la directiva europea;
- análisis multitáctil.