Por «datos de cero» se entienden todos los datos facilitados directamente por los usuarios de forma totalmente consciente, por ejemplo respondiendo a encuestas o sondeos.
Se trata, por tanto, de datos que pueden recopilarse de forma totalmente transparente a los ojos del usuario ofreciéndole a cambio contenidos en profundidad o recursos gratuitos.
Junto con los datos de primera parte, los datos de segunda parte y los datos de tercera parte, completan el universo de datos e información que pueden recopilarse sobre los usuarios, representando la última frontera de la gestión de datos y la personalización de la experiencia del cliente.
Como podemos imaginar, de hecho, se trata de datos que sólo pueden recopilarse si se solicitan explícitamente y, por lo tanto, tienen un gran valor para la propia elaboración de perfiles de usuario.
La recogida de datos de parte cero requiere la creación de una verdadera relación de confianza entre empresa y usuario y sólo si se preserva puede dar sus frutos. Por lo tanto, es importante que la empresa ofrezca algo a cambio que esté equilibrado con los datos solicitados, al igual que es fundamental garantizar la máxima transparencia y corrección en la gestión de los datos recogidos.
Cada vez son más los usuarios que, por término medio, aceptan ceder datos e información personales para que se utilicen con el fin de recibir a cambio ofertas personalizadas y experiencias de navegación y compra personalizadas.